De la familia de viticultores de Burdeos, François Lurton estableció sus viñedos en el año 2000, en un terroir virgen, con suelos pobres y un clima equilibrado.
Este evento ocurrió como la culminación de una larga búsqueda en varias regiones chilenas, que terminó con la adquisición de 28 hectáreas en el Valle de Lolol, en la provincia de Colchagua.
La elección de este lugar resultó ser un éxito para cultivar viñedos, debido a sus condiciones climáticas marcadas por el Océano Pacífico y el suelo de granito.
Actualmente, Lurton continúa explorando diferentes posibilidades, como las plantaciones a gran altitud con variedades que requieren climas más fríos como Sauvignon blanc e incluso Pinot noir.
El suelo de la tierra elegida por François Lurton hace que variedades como Pinot noir y Syrah se adapten muy bien, también debido a la exposición de las parcelas.